lunes, 11 de octubre de 2010

Sting - Shape Of My Heart

Breve biografía de Ren Shan

                                  Nacido durante la segunda mitad del siglo XX. Desde pequeño su padre le hizo conocer los caminos del País, y de otros Países también.
                                 Viajó en Avión, en Tren, por carretera. El primer viaje aéreo lo hizo a los 3 meses de vida, destino: CORDOBA; Provincia de la que era oriundo su papá.
                                 Los viajes mas interesantes desde niño eran a Lobos y San Miguel del Monte, donde Ren, pudo entrar en profundo contacto con la Naturaleza. Quizás allí, ésta última se convirtió en su madrina.
                                 Conoce muchas provincias del Norte, del Sur, del Llano y del Litoral como dijera Atahuallpa.
                                 También ha estado en países Sudamericanos y Norteamérica
                                De amplia mente, y curiosidad casi absoluta, ha visto cosas que jamás alguien le creería que las vió. Por tanto el Joven Ren, las ocultó por mucho tiempo en la Memoria. "Herramienta de la Vida y de la Historia", parafraseando a León Gieco.
                               Ren Shan tuvo su pasado de aprendizaje para desacerse de las injusticias comentidas por él y por los demás. Como ejemplo se puede recordar una etapa en la que fué cazador, y de como colgó las armas para no utilizarlas nunca más contra un ser vivo.
                               Tuvo una etapa de militancia política en la que fué descartando partidos e ideologías -y por esa curiosidad nata que lo caracteriza-  al leer a Orwell (padre de: 1984, Rebelión en la granja Por ej.) descubrió una declaración de éste en la que decía:  -"Soy un Anarquista Conservador".
                               Por tal revelación, y por las características de Blair (apellido real de Orwell) como persona pública, se propuso Ren, a oponerse a las ineficacias y abusos del sistema sin dejar de reconocer lo valioso que tienen las instituciones y las propiedades.
                               En palabras del mismo: -"Las instituciones como la Escuela, son valiosas en tanto y en cuanto brinden la oportunidad de aprender a las personas y a compartir las diferencias que las enriquecen mutuamente. Debe uno oponerse a los autoritarios y a los indiferentes y mezquinos que trabajan en ellas, ya que no enriquecen...sino que restan, oprimen y actúan con astucia y con malicia separatista. Las Propiedades, no deben ser de todos, ya que es bueno tener un lugar donde refugiarse en este bosque de cemento, eso no quita que la propiedad si es necesario deba compartirse con aquellos que alguna vez lo necesiten exceptuando como propiedad a las personas...Ya que uno es propietario de si mismo mientras viva. Luego vuelven a la Naturaleza que por sus cualidades es la única 'Propietaria de Todo' ".
                            En relación a su formación académica, bueno...la VIda lo ha formado y su propia mente y la observación de la naturaleza. Pero formalmente es Profesor en Ciencias Naturales y Docente.
                           Recibido a fines del Siglo XX...Para actualmente -Joven en cuerpo y mente- seguir ejerciendo esta Profesión que le permite llevar su deseo de que se conserven los valores esenciales en el corazón de la juventud.
                           Pero la cosa mas insólita y de la que muchos se habrán preguntado alguna vez  es como es que Ren Shan se llama así...Bueno, la historia dice que este jóven, una vez tuvo(y aún conseva) una publicación de la UNESCO, llamada "Le Courier", dedicada enteramente al "País del Medio" o Zhong Ghuo, es decir China.
                         Su espíritu curioso hacía bastante tiempo que le llamaba a Oriente. En la lectura dedicada a la Caligrafía y escritura (4 artes en una, dicen los chinos) encontró los dos ideogramas que según el lo representan y que la No Casualidad se los presentó ese día: el que suena : Ren (el hombre, lo humano) y Shan (la montaña, lo firme)  y como necesitaba un seudónimo para firmar sus poesías y dibujos autodidactas se apropió de ellos. Para ser REN SHAN.
                          Luego un compañero de trabajo profesor de Historia, y...¡Como son las cosas!: padre de un futuro alumno. Lo bautizó "el Montañés" por su barba y cabello largo, su robusta complexión física y ...por sus escocesas camisas de "mangas largas arremangadas"...Sin querer este señor estaba dando por sentado otro de los significados del la combinación de esos dos ideogramas chinos. Y de este modo afianzando para siempre el nombre a nuestro Amigo.

 Ren Shan por Ren Shan

El "Pillan" de Lago Hermoso (Neuquén)

En un viaje que realicé a Neuquén, también como mochilero, recorrí el sur de la provincia.
El recorrido final del viaje fue San Martín de los Andes. A dieciséis kilómetros, por el “Camino de los siete lagos” está el puesto de guardaparques de Lago Hermoso. Por aquel tiempo vivía en esa seccional un amigo Guardaparques.
Detrás de la casa dominaba el paisaje un cerro, en cuya cima vi al llegar un brillo elíptico…Le pregunté que era y me contestó:-Es un resto de glaciar.
– ¿Se puede llegar allí? Pregunté.
-¡Si!. Mañana, si tenés ganas, te acompaño.
Allí cerramos el trato.
Al otro día, me levanté, desayuné y puse unas pocas cosas en un morral y salimos por la picada (1) que circunda los alrededores de la “Estancia de la Mil Rosas”, célebre por su dueña y por los personajes de nuestra historia reciente que recalaron por allí.
Habremos hecho unos quinientos metros cuando me dijo que cruce el alambrado, que camine unos metros en línea recta hasta que encuentre el camino. Por allí debería subir en zig-zag hasta que el camino presentara una bifurcación. –Si seguís a la derecha, vas a continuar la picada hasta que se suavice en el monte de altura. Pero si tomás a la izquierda vas a dar con la toma de agua y el camino muere ahí.
Pero no me acompañó. Me dejó en el alambrado y se despidió.
No hice otra cosa que equivocar el camino, y tuve que retroceder para retomarlo. Hay momentos en que se hace empinado y es difícil subir si uno no va parando y descansando. Es notable el canto del chucao (2), un pajarito huidizo, pero que emite una dulce y sonora canción. Hay también usnea (3) en todos los árboles y unas plantas parásitas que hunden sus raíces en las ramas para succionar la savia de las lengas. Por momentos se podían ver mangrullos, -y de hecho he subido a algunos- destinados a observar los ciervos colorados del coto privado de la “Sra. Maia”.
A partir de este momento el sendero se hace más suave pero no menos sinuoso dentro de un bosque como aquellos de las leyendas de terror centroeuropeas. Allí hay chelcos (4) que corren sobre las rocas o toman sol en ellas y el estridente chucao.
Al llagar a la primera cima, el bosque deja paso a una estepa de altura en donde pude visualizar una laguna de aguas de color rojizo. Y si uno quería seguir subiendo el sendero terminaba en un mallín (5), que cuando lo atravesé pude presentir que estaba siendo algo así como “observado” .Allí el paisaje cambia por tercera vez, y se hace más escabroso y más árido. El viento y los tábanos (6) no daban respiro. Solo el glaciar brillante por la luz solar parecía un gran espejo de plata en la cima.
-¡Allí voy! Grité. Y comencé a subir.
Debo detallar un par de cosas antes: El Guardaparque me dijo que en la cima encontraría una cruz de postes muy grande, que por lo que observaba con largavistas se había caído o algo así.
Entre mis efectos personales llevaba un par de lentes de sol, que como me incomodaban introduje en el bolsillo de mi camisa, pasando una de las patillas por el ojal y también el botón. Es decir que los anteojos estaban muy asegurados allí.
Bien, al llegar caminé un poco, mirando ya que el cielo es muy claro y hacia el oeste se puede observar toda la línea de volcanes del lado chileno con nuestro Lanín bien notable en su cono nevado, ya que se impone por ser el mas cercano.
Descubrí la cruz, tal como decía mi amigo, y me dispuse a pararla. Era una cruz grande, de más de dos metros de altura en cuyo extremo había una cruz de palos más pequeña atada con alambres. Tenía tres tensores de alambre la gran cruz, que se habían cortado, seguramente por las nevadas y los vientos de invierno. Hice lo que pude y la cruz estuvo al cabo de mas o menos una hora otra vez en pié.
Dicen los investigadores, que las cruces no son representaciones religiosas de los mapuche…sino un instrumento que actúa como “pararrayos” o algo así. Luego de descansar al menos una hora, emprendí el regreso, con el sol de frente. Pero, cuando voy a extraer el par de anteojos desabrocho el botón y ¡Sorpresa!, ya no estaban los lentes. Volví sobre mis pasos, di vueltas y no los encontré…caminé por los lugares que había visitado giré en círculos pero nada, nada, nada.
Bajé hasta la casa, llegando alrededor de las diecinueve a darme un chapuzón en un arroyo que pasa por un costado.
Volví a Buenos Aires. Y Años después con un amigo planificamos un viaje a Neuquén, pero con la variante que decidiríamos a cara o cruz que extremo de la provincia recorreríamos primero. Ganó el norte y fuimos a visitar a sus amigos, allí nos ocurrieron cosas misteriosas pero son para contar en otra ocasión.
Bajamos al sur y volvimos a San martín a visitar a este guardaparque y su familia –mis amigos-. Estuvo bueno el encuentro pues llegamos tarde al pueblo, y por pura casualidad desde la seccional de bomberos del Plan de manejo de Fuego los llamamos por radio y nos vinieron a buscar, ya en la cabaña nos bañamos, y cenamos, y hablamos hasta tarde. No faltó el cuento de ovnis y antes de dormir fuimos a mirar el cielo tan colmado de estrellas.
En eso no pude evitar dirigir mi mirada al este, y en la mole del cerro se ve brillar débilmente con la luz de la luna: el glaciar elíptico.
Decidí decirle a Julio –el otro mochilero-si quería subir y me contestó que Si. Entonces nos aprestamos encarar la empresa al otro día.
Pero antes voy a darles un detalle más: Entre ambos viajes estudie bastante sobre costumbres mapuches, y según cuenta un padre salesiano de origen italiano, que existen los espíritus de antepasados que custodian las montañas y que para no ofenderlos y que permitan el pasaje o la estadía en el cerro se les debe ofrecer cuentas de vidrio o algo que brille, de todas maneras si esto no ocurre tomarán algo de ti que reúna esas condiciones, o si profanas su morada te darán un castigo. ¡¡Ahí toqué tierra!! , Cuando estuvimos la primera vez que fui a la provincia en los Lagos Aluminé y Moquehue subimos al extinto volcán Batea Mahuida con una amiga.
El Cerro tiene una gran laguna circular de aguas azul-zafiro en su viejo cráter. Bordeamos su cara que queda en pié y allí arriba nos dio sed y como la caramañola estaba vacía la llené con nieve granulada con ayuda de una espátula de metal que tenía.
Lo más interesante es que cuando cargué la cantimplora, guardé la espátula en un bolsillo que llevaba en mi cinturón y le cerré el botón…Al bajar y querer sacar la espátula para hacer una tarea: No estaba…volvimos sobre nuestros pasos, en círculos y nunca la encontramos, solamente que cuando la busqué…el botón estaba cerrado.
Regresando a la historia: Esta vez, que subí con mi amigo me dije -¡Ah, no. Esta vuelta no te vas a quedar con nada. ¡Ya verás!.
Y cuando pisamos la cima, le pedí en voz baja al Pillán -para que Julio no escuche- (7) que me deje entrar al cerro y le ofrendé unas monedas de veinticinco y cincuenta centavos. Y para probar la “suerte” Llevé de manera descuidada, otro par de anteojos, la navaja, más monedas, una lupa. En bolsillos abiertos, no con botones puestos.
Y les aseguro que: Pusimos de nuevo la cruz en pié, acarreamos piedras grandes para asegurarla, caminamos, nos inclinamos…y al bajar no habíamos perdido nada ninguno de los dos.
Ahora cada vez que subo a un cerro en esa provincia ofrendo algunas monedas brillantes a su pillan y nunca más se me ha extraviado nada. -¿Pueden creerlo?.
Ren Shan


(1) Picada: Sendero en el monte de huella angosta. Suele hacerse por la circulación de animales en forma periódica.
(2) Chucao: Ave patagónica que vive en el monte de canto notable y melodioso.
(3) Usnea: El Liquen “barba de viejo”.
(4) Chelco: Especie de lagartija.
(5) Mallín: Terreno pantanoso, que asemeja una pradera, o manchón de hierba.
(6) Tábano: Díptero, insecto parecido a una mosca, de cuerpo mas grueso que pica a los animales y humanos en busca de sangre para alimentarse. Es muy dolorosa su aguijonada.
(7) Pillán: Espíritu protector de un elemento de la naturaleza. Dicen algunos investigadores que son almas de personas ancianas o de caciques que al morir se les encomienda a proteger ese elemento. Hay pillanes en las montañas, los ríos, los bosques.


Ren Shan

La "Calcu" del Moquehue

En uno de mis tantos viajes como mochilero a la provincia de Neuquén, sucedió el hecho que voy a contar.
Habiendo llegado a Zapala, decidimos “bajar” a los Lagos Aluminé y Moquehue.
La zona es sobrecogedora por su belleza y su misterio. Uno puede disfrutar de la naturaleza solo quedándose quieto, observando y escuchando.
Existe un bosque muy frondoso en los alrededores de los lagos, formado por Lengas, Ñires y otros Notofagus (1), que tienen callos formados por los Llao llao (2) y que de sus ramas penden extensas formaciones de “barba de viejo” (3) esto les dá un aspecto similar al de los bosques de los cuentos de hadas. Son notables también los Pehuenes: La araucaria del sur, cuya edad dicen los pobladores supera los quinientos años: y no es de dudar, pues cada pino de éstos mide de veinticinco a treinta metros de altura y sus troncos superan en diámetro los casi tres metros.
Debajo de una araucaria de éstas construimos el campamento, con un fogón revestido de piedras enterradas. Alrededor de él nos reuníamos cada noche a disfrutar del descanso y la cena…y por supuesto, a contar historias.
A veces por la noche solíamos escuchar los quetros (4), en el lago y también unos caballos que a juzgar por los ruidos se metían a la noche a revolcarse en las frías aguas.
En este contexto, es que sucede esta historia.
Una tarde de esas que habíamos regresado de Chile, del Paso Icalma. Preparamos unos mates y nos sentamos cerca del fogón a intercambiar impresiones de nuestra visita al país vecino, se fue haciendo tarde y una de mis compañeras preguntó: -¿Alguien tiene idea de lo que vamos a cenar? Nos miramos entre todos y Fernanda invitó a Sonia y a mí, a ver si en la proveeduría de un tal Almeida podíamos conseguir algo para preparar la cena.
El almacén de ramos generales (y según las malas lenguas “centro de contrabando de ganado” argentino-chileno) distaba del campamento unos mil quinientos metros mas o menos. Así que teníamos que atravesar una buena parte de bosque hasta acercarnos al camino, donde a su vera se hallaba este local.
Unos metros antes de llegar al camino, desde el sendero, nos pareció ver sentada sobre un tocón de araucaria a una delgada niña de espaldas, con un lacio y bello cabello oscuro. Era a lo lejos menudita.
A medida que nos fuimos acercando, la mujer - notamos que no era una niña- permaneció inmóvil sin darse vuelta.
Vestía con ropas masculinas, una camisa y pantalón de trabajo, estaba cruzada de piernas, calzaba alpargatas y en una de las manos que tenía apoyada sobre la rodilla elevada sostenía un sombrero de ancha ala.
¡Sorpresa! al llegar al lado de ella repentinamente se dio vuelta, y juro, que nunca había visto un rostro de tan marcada fealdad. Tan contrastante con la imagen que presentaba de espaldas que aseguro: uno podría señalar que era atractiva.
Al pasar a su lado mis compañeras hicieron un comentario y se rieron, sin disimulo. A la Joven no se le movió ni un músculo, pero al darme vuelta fugazmente, advertí en su rostro feo una sonrisa enigmática que me hizo correr un escalofrío por la espalda.
Me llamó la atención que al volver de la proveeduría, por el sendero, ya no estaba en el tocón. Se había esfumado.
Nuevamente mis amigas hicieron comentarios y se rieron…Y recordé una frase del Martín Fierro que repetía a menudo mi papá…”Quien ande en pagos ajenos debe ser manso y prudente”. Pero enseguida le resté importancia al hecho, ya que en el campamento estaba circulando el mate que acompañamos con pan casero.
Alguien, cocinó un rico guiso de arroz para la cena, y a la costa del fuego charlamos y recordamos el incidente de la mujer, donde coincidíamos que era además mapuche (5).
Luego de cenar quedamos en rueda, nos reímos y procuramos no echar mas “leña al fuego”…en los dos sentidos. Cuando las brasas se fueron extinguiendo nos metimos en la carpa a dormir.
No había pasado más de una hora cuando se sintió un ruido de hojas que caen…Luego silencio.
Creo que me estaba quedando dormido cuando una de mis amigas dijo: -¡¡Me tocaron la cabeza!!!
La otra gritó: -¡¡ Me pegaron una patada en la espalda!!
Encendimos las linternas y pudimos comprobar las deformaciones producidas en la tela, eran manos y pies no había dudas… salimos a los tumbos todos alumbrando los alrededores y…nada.
Nadie podría haber desaparecido tan rápido. No oímos ruido de pies a la carrera ni ramas rotas…nada.
Pero una cosa que nos dejó helados es que de pronto el fogón se encendió iluminando todo y en un instante se apagó. Solo quedando las luces de nuestras linternas.
Deliberamos un rato en voz baja, fuera de la carpa los cinco. No había ruidos. Miré hacia arriba y la bóveda azul negro del cielo me mostraba una perfecta Vía Láctea con millones de estrellas. Siendo el único varón del grupo quedé acostado en la puerta de la carpa por si acaso con la linterna y una rama como elemento contundente…
A la mañana los pájaros nos fueron despertando, y recorrimos. Lo único que se veía eran nuestras pisadas, ninguna otra marca extraña. Nos miramos durante el desayuno en silencio.
El día transcurrió como una bonita y calurosa jornada: fuimos al lago y recorrimos otros tantos lugares del otro lado de la angostura atravesando el puente.
Cuando volvimos al campamento, encendimos fuego para hacer mate. Había refrescado…el sol en su caída iluminó el bajo bosquecito de lengas a unos cien metros de la carpa, y pasó una tropilla (6), mas atrás venía el arriero. Era la mujer. Aún a lo lejos su rostro se veía inquietante. Miró hacia el campamento y se le dibujó una amplia sonrisa…iba erguida en el caballo y se perdieron en la espesura.
Enmudecimos. Nadie habló más del asunto.
Con el tiempo y estudiando el pueblo mapuche, dedujimos que era una machi (7) o una calcu (bruja) que se había cobrado las burlas de mis amigas.


Ren Shan




(1) Notofagus: Género de árboles de madera blanda.
(2) Llao llao: Hongo comestible que se desarrolla en las ramas de estos árboles. Deja cicatrices como verrugas arrosetadas.
(3) Barba de Viejo: Especie de liquen que crece también sobre las ramas y cuelga simulando la barba crecida de un anciano.
(4) Quetro: Ave acuática. Una especie de pato.
(5) Mapuche: Pueblo originario de la región cordillerana patagónica argentino chilena.
(6) Tropilla: Grupo de caballos domesticados algunos y otros no , propiedad de los pobladores rurales
(7) Machi: Curandera mapuche. Algunos investigadores sostienen que proceden de un linaje. Aunque otros se vuelcan por señalar también que aquellas que poseen algún defecto físico son formadas como machi y así la tribu la acepta.


Ren Shan

El Deja Vú

        Misterios tiene la naturaleza, y el hombre es parte de ella.
        Tuve que hacer el Servicio Militar. Pero abreviando. Tuve la suerte de hacerlo en siete meses de los cuales, Agosto, completo, estuve de licencia.
        El 31 de ese mes habíamos quedado de encontrarnos, todos los que debíamos regresar al Regimiento, en la Estación Constitución del FC Roca. Allí llegábamos los cinco o seis tipos del Escuadrón “A” (todos soldados) para partir en la primera etapa de nuestro viaje.
       En un momento de la conversación previa a embarcar en el tren que partía para Bariloche uno de los chicos –Urbano, se llamaba- dice:”-¡Bueno! De ahora en adelante partimos para San Antonio Oeste. ¡Primera etapa! Allí tenemos que hacer noche, y luego esperar al "Don Otto" para la segunda etapa hasta Puerto Deseado”.
      Sin dudar le digo:”- ¡San Antonio Oeste! Yo estuve ahí. Es un pueblito a orillas del mar, con casas de todo tipo, aunque hay unas construcciones viejas que parecen del Far West”.
      Los otros me contestan algo así como: “-¡Bueno, tenemos Guía entonces…!
Así fue que en el viaje hubo un approach con unas chicas Chilenas de Temuco. Una de ellas: Ana. Luego me escribió una carta al Regimiento. Pero la aventura mas linda y que duró poco en ese viaje, fue que nos enamoramos mutuamente con una chica de Patagones que viajaba a Maquinchao (unos km. Antes de Bariloche).
      Ella era una quinceañera, estudiante secundaria, muy bonita. No Bella. Bonita. Yo me escapé al baño, y pasé por el vagón Primera. Al volver nos vimos. Ella sonrió, y como había un lugar libre me senté y le dije: “-Me llamo, Juan. ¿Y vos?.”. Las otras compañeras soltaron la risa, ella contestó que se llamaba Betty. Me preguntó si tenía frío y le conteste que efectivamente así era.

      Me ofreció taparnos con su manta, y que me sentara junto a ella. luego conversamos y nos reímos los cuatro. Al cabo de un tiempo, el sueño nos fue venciendo. Y dormimos abrazados. Pero… ¡Mala suerte! A poco de llegar a destino el “Chancho” pasa controlando el pasaje, nos despierta y me increpa diciendo que mi lugar, por mi condición de soldado es en clase Turista. ¿Qué hacía yo ahí?, le contesté algo así que era amigo de las chicas y que como tenía frío me invitaron y vine.
    Tuve que volver al vagón helado. Repentinamente llegamos a San Antonio Oeste. Nos bajamos y le golpee el vidrio a Betty. Me dio la dirección a través del vidrio, que opaca los sonidos. Y, por ende, al no tener papel. En poco tiempo la olvidé. Y lo lamenté. Ya que la cara de Ella, triste, y las dos compañeras que la abrazaban, me acompañó por mucho tiempo.
    Cuando, recuperé mi estado natural,¡Grande mi sorpresa!. El cartel, los tamariscos, la casilla de encomiendas, las carretillas y el hall central de la Estación me eran tremendamente familiares. LO CONOCÍA TODO.
    No solo eso, como era de noche debíamos apresurarnos para encontrar hospedaje y negociarlo por esto de “la escasez de divisas”. Sin dudarlo bajamos a la calle y seguían los “recuerdos”, la calle me era terriblemente familiar, tal es así que me dijeron: “-¡Che Trullet, llevanos al hotel ese que conocés!”. –¡Bueno! Les dije.- Pero es acá a la vuelta por que este es caro y por el aspecto nos van a rajar a la m…”. Me refería al hotel que se encuentra en la avenida principal que desemboca a la estación de ferrocarril y que tiene un frente de ladrillo a la vista con una torre con techo a cuatro aguas,
   Doblamos, y la vereda de madera de una cuadra al mejor estilo cine yanqui de Cow Boys, confirmó que definitivamente conocía el lugar…. ¡Aplausos! –de mis compañeros- y ya hubo quien negoció 2 habitaciones. Pero que era una con cama matrimonial y una camita simple y la otra pequeña con cama doble marinera. Baño compartido. -¿Cuántos son?. Dijo la Dueña.
“-¡Siete!”. Respondió uno. Y la vieja dijo que 2 no iban a ser hospedados, que lo lamentaba. Cenamos en el “Saloon”, una prepizza ácida y una cerveza los siete. La borrachada malévola nos observaba. Le comentamos a la dueña que ibamos a dar una vuelta y ver si los otros dos se podían ubicar en otro lado. Nos dio las llaves.
   A la vuelta había un Cine, y ¿que daban?: “Drácula” con Ben Gassara. Nos metimos a verla. El cine a full. Terminó como a la una AM. Y volvimos, con la premeditada idea de dormir los siete en el “Saloon”. Una odisea, solo durmió uno o dos. Es para contarlo en otra oportunidad por que es gracioso.
   La realidad es que este lugar es mi deja vú. Lo conocía antes de haber ido. Es más, las imágenes del pueblo, ahora que lo estoy escribiendo se agolpan en mi mente, y veo más cosas que las que alcancé a ver cuando volví de licencia del Servicio Militar y también cuando con Pablo mi amigo del Cole Secundario fuimos a Las Grutas y estuvimos unas horas esperando el Micro en la Terminal de San Antonio Oeste.
Ren Shan

domingo, 10 de octubre de 2010

IMAGINA

IMAGINA

Imagina que no hay paraíso,
Es fácil si lo intentas,
Ningún infierno debajo de nosotros,
Arriba de nosotros, solamente cielo,
Imagina a toda la gente
Viviendo al día...

Imagina que no hay países,
No es difícil hacerlo,
Nada por lo que matar o morir,
Ni religiones tampoco,
Imagina a toda la gente
Viviendo la Vida en paz

Imagina que no hay posesiones,
Me pregunto si puedes,
Ninguna necesidad de codicia o hambre,
Una hermandad del hombre,
Imagina a toda la gente
Compartiendo todo el mundo...

Tu puedes decir que soy un soñador,
Pero no soy el único,
Espero que algún día te nos unas,
Y el mundo vivirá como uno solo.

Imagina entonces que tienes muchos Amigos
todos, aquellos que te acompañaron en la VIDA
Algunos estuvieron, otros están, y seguirán estando...
Las circunstancias han hecho que muchos no estén
físicamente en este plano, pero sí en el corazón

En todo este tiempo, siempre has enfrentado al
sufrimiento, y has vencido
la dicha de tener esa fortuna que se llama AMISTAD
cada minuto es una historia, y otra y otra...
y asi construyes imaginando tu día a día

Quizas seré siempre un soñador,
Sé que hay muchos como yo
Ojalá siga habiendo soñadores en el MUNDO
para que sea mas lindo seguir este CAMINO juntos